Jardineria,Poda de Árboles Frutales

¿Cuándo hay que realizar la poda de árboles frutales? ¿qué ramas debo dejar y cuáles cortar? En este artículo de jardinería le explicaremos paso a paso las respuestas a estas preguntas para que sepa realizar la poda con éxito.

Las siguientes recomendaciones son aplicables a nivel general para la poda de cualquier tipo de árbol frutal de hoja caduda, tal como son los manzanos, perales, cerezos, membrilleros, melocotoneros, almendros, etc. Los cítricos siguen otras pautas de poda que serán explicadas en un artículo específico. CUANDO PODAR: El invierno es la mejor época para dar la forma ideal a la copa de un árbol frutal mediante la poda. La caída de las hojas nos permitirá ver el interior de la formación de sus ramas. En zonas de fuertes heladas convendrá esperar al final de la época invernal, pero siempre debemos podar cuando todavía el árbol esté en parada vegetativa por la estación invernal. TÉCNICA DE PODA: La copa del árbol frutal debe ser ligera buscando una estructura abierta, permitiendo el paso de la luz a la parte central del árbol. Gracias a esto, permitiremos adelantar la entrada en floración, los frutos serán mayores y con mejor color y sabor. Además, si la estructura del frutal permite una mejor aireación por el interior del árbol, minimizaremos el efecto de las plagas que puedan afectarle.
PODA DE FORMACIÓN: Cuando el árbol está formando su estructura principal en sus primeros años de vida, debemos acortar ligeramente la prolongación del tronco. Las tres ramas de soporte principal (número 1 en figura adjunta) deberán acortarse en sus prolongaciones (número 2 en figura adjunta). La poda debe ser poco severa. Si tenemos más ramas de soporte, dejaremos 3 ó 4 eligiendo preferiblemente las situadas a la misma altura, aunque en direcciones separadas para que cada una tenga su zona de cubrimiento. Además, si tenemos ramas largas que suban junto al tronco, debemos sujetarlas abajo mediante cuerdas de manera que apunten horizontalmente hacia afuera. De esta manera liberaremos la copa del frutal y conseguiremos que el árbol crezca a lo ancho dejando espacio para las ramas productoras de frutos (F en figura adjunta), mejorando su floración y producción. CRECIMIENTO DEL ÁRBOL: hasta que el frutal alcance su tamaño adulto, deberemos mantener el tipo de corte de los primeros años, enfocado principalmente a buscar una copa del árbol que no sea frondosa de ramas matrices, sino que éstas las vayamos guiando hacia el exterior. Las ramas que salgan a media altura hacia la copa del árbol, serán sujetadas con cuerdas de manera que queden lo más horizontal posible hacia el exterior del árbol. Haremos una poda ligera de mantenimiento a la prolongación de la copa y las tres ramas de soporte principal, para mantenerlas en un tamaño controlado y que vayan cogiendo fuerza. Si alguna de las tres ramas de soporte principal crea bifurcaciones hacia arriba, las cortaremos de manera que demos fuerza al desarrollo horizontal de estas ramas principales. CUANDO EL ÁRBOL YA TIENE SU TAMAÑO DESARROLLADO: El árbol ya habrá desarrollado su forma y la poda debe limitarse a cortar las ramas nuevas que vayan saliendo entrecruzadas, sobre todo en la parte de la copa, para mantenerla aligerada y cortes de mantenimiento del tamaño de las ramas principales de soporte. PODA DE ÁRBOLES VIEJOS: Si nos encontramos ante un frutal de muchos años sin recibir su poda adecuada, veremos que sus frutos son escasos, más pequeños y se encuentran localizados en las partes más externas del árbol. Deberemos reducir la anchura del árbol ligeramente y sobre todo, cortando las ramas que crezcan hacia abajo y las ramas viejas del interior del árbol que no producen fruto. Al quitar las ramas que cuelgan hacia abajo de las ramas viejas, forzaremos al árbol a desarrollar nuevas ramas que nacerán de éstas hacia arriba, dando más frutos. Si la copa es demasiado densa, la clareamos. Gracias a la entrada de luz al interior del frutal, veremos que empezarán a crecer nuevas ramas que producirán fruto rápidamente y de mayor calidad. Repetir este estilo de poda cada 4 ó 5 añosCÓMO CORTAR UNA RAMA GRUESA: Si debemos cortar una rama ancha y con mucho peso, los pasos para hacerlo adecuadamente son: Primero; cortaremos desde abajo hasta el centro del tronco a unos 20 cm hacia el exterior de donde querremos dejar el corte final. Segundo; cortaremos desde arriba hasta el centro del tronco un poco más hacia el exterior del corte anterior. De esta manera caerá la rama pesada sin resquebrajarse ni dañar la rama durante el corte a causa del peso de la rama. Tercero; finalmente cortaremos, ya sin problema de peso, la rama en el punto donde deseabamos el corte. Este corte debe ser perpendicular a la rama cortada (por ejemplo, si estamos haciendo un corte pegado al tronco principal del árbol, no debemos hacerlo paralelo al tronco que queda, sino haciendo 90º a la rama que estamos quitando). Al cortar, no debemos hacerlo pegado al tronco sino dejando unos milimetros de distancia (no más), con lo que respetaremos el nudo que quedará un poco más saliente en la parte de abajo del corte y evitaremos así que quede un trozo de rama que provocará que poco a poco el nudo engorde y se deteriore, dando problemas en la zona habitualmente tras 10 años tras el corte.CÓMO CORTAR UNA RAMA GRUESA: Si debemos cortar una rama ancha y con mucho peso, los pasos para hacerlo adecuadamente son: Primero; cortaremos desde abajo hasta el centro del tronco a unos 20 cm hacia el exterior de donde querremos dejar el corte final. Segundo; cortaremos desde arriba hasta el centro del tronco un poco más hacia el exterior del corte anterior. De esta manera caerá la rama pesada sin resquebrajarse ni dañar la rama durante el corte a causa del peso de la rama. Tercero; finalmente cortaremos, ya sin problema de peso, la rama en el punto donde deseabamos el corte. Este corte debe ser perpendicular a la rama cortada (por ejemplo, si estamos haciendo un corte pegado al tronco principal del árbol, no debemos hacerlo paralelo al tronco que queda, sino haciendo 90º a la rama que estamos quitando). Al cortar, no debemos hacerlo pegado al tronco sino dejando unos milimetros de distancia (no más), con lo que respetaremos el nudo que quedará un poco más saliente en la parte de abajo del corte y evitaremos así que quede un trozo de rama que provocará que poco a poco el nudo engorde y se deteriore, dando problemas en la zona habitualmente tras 10 años tras el corte.COMO CORTAR UNA RAMA FINA: Debemos elegir la última yema que queremos conservar y unos cm por encima de ella realizaremos un corte en bisel (diagonal) dejando la parte más alta del corte encima de la yema. La yema que dejaremos deberá estar en la dirección que deseemos que siga creciendo la rama.